Estados Unidos – Además de anunciar esos cambios en el iPhone, la compañía dio a conocer el Apple Watch Series 10, que tiene esquinas más redondeadas y una pantalla más grande y brillante que es casi un 10 por ciento más delgada. También presentó unos nuevos AirPods Pro, capaces de reducir automáticamente el ruido en conciertos o cerca de obras, y de actuar como audífonos de calidad profesional.
Los nuevos teléfonos llegan en un momento crucial para Apple y el sector tecnológico en general. El negocio de Apple se ha debilitado en los últimos años a medida que los usuarios de iPhone conservaban sus teléfonos durante más tiempo. Ha hecho una gran apuesta al realinear sus equipos de ingeniería para trabajar en inteligencia artificial con la esperanza de que la tecnología, que puede responder preguntas, crear imágenes y escribir código de software, persuada a la gente a comprar nuevos dispositivos.
La industria tecnológica espera que Apple contribuya a generalizar la inteligencia artificial. Microsoft, Google y Samsung han incorporado funciones de inteligencia artificial generativa a sus productos, pero aún no han conseguido que se adopten de forma generalizada. Pero Apple ha demostrado en el pasado que puede esperar para adoptar una tecnología emergente y popularizarla, como hizo con los reproductores de música digital, los celulares y los relojes inteligentes.
“La pregunta es: ¿qué tan buena es la inteligencia de Apple?”, dijo Bob O’Donnell, analista jefe de TECHnalysis Research, una empresa de investigación de mercado. “Hemos visto demostraciones increíbles de Microsoft, Google y OpenAI, pero cuando empiezas a trabajar con estos servicios, muchos son trucos de salón. Ayudar a la gente normal a hacer algo útil cada día haría que la gente diga: ‘Necesito un iPhone nuevo’”.
El iPhone 16 debuta con menos capacidades de las que la compañía comercializó en junio, cuando anunció su sistema Apple Intelligence. A partir del mes que viene, los teléfonos resumirán las notificaciones, ofrecerán recomendaciones de escritura y permitirán encontrar fotos más rápidamente describiendo una imagen a Siri. La IA también permite utilizar la cámara para identificar tipos específicos de flores, plantas o razas de perros.
La empresa dijo que con el tiempo se irán incorporando otras funciones, como la capacidad de Siri de responder a algunas peticiones relacionadas con información personal del teléfono, como extraer detalles de un mensaje de texto sobre el vuelo de un familiar y comprobar la información de la aerolínea para conocer los detalles de la llegada en tiempo real.
Las peticiones no relacionadas con información personal se dirigirán a ChatGPT, que estará disponible en los iPhone después de que Apple llegara a un acuerdo con OpenAI en primavera.
El limitado conjunto de funciones del iPhone es emblemático de la cautela con que Apple aborda la inteligencia artificial generativa. Por el contrario, el mes pasado Google presentó un teléfono Pixel que incluye un asistente virtual conversacional, la posibilidad de editar personas en fotografías y la oportunidad de utilizar el chatbot de inteligencia artificial generativa de la empresa, Gemini, para responder a preguntas complejas. Google también ha tenido fallos de inteligencia artificial, como un chatbot que decía a los usuarios que comieran piedras.
Apple lanzó cuatro versiones del iPhone 16, todas ellas con un nuevo botón de cámara. Los modelos básicos, el iPhone 16 y 16 Plus, cuestan desde 799 dólares y cuentan con un procesador más rápido, una cámara más potente y un “botón de acción” que se puede programar para recuperar automáticamente funciones como la linterna del teléfono. Los modelos de gama más alta, el iPhone 16 Pro y Pro Max, cuestan desde 999 dólares y cuentan con una pantalla ligeramente más grande, una batería de mayor capacidad y la posibilidad de capturar audio con calidad de estudio. Estarán disponibles en las tiendas el 20 de septiembre.
Para potenciar la inteligencia de Apple, ambos teléfonos vienen con procesadores similares. El modelo base del iPhone 16 incorpora el chip A18, mientras que el iPhone 16 Pro cuenta con un chip A18 Pro. La actualización hace que la diferencia entre las capacidades de los teléfonos de menor y mayor precio sea menor que en los últimos años.
Wall Street está entusiasmado con los teléfonos con inteligencia artificial, y los analistas predicen que estas funciones podrían ayudar a Apple a vender la cifra récord de 240 millones de iPhones el año que viene, un 12 por ciento más que este año.
La era de la inteligencia artificial generativa también presenta nuevos retos para Apple. Durante la mayor parte de los 17 años del iPhone, la empresa desarrolló un único sistema de software que actualizaba en todo el mundo. Pero muchos países quieren que los sistemas informáticos y los datos que soportan la inteligencia artificial se encuentren dentro de sus fronteras. También se espera que los sistemas de inteligencia artificial sean sensibles a las diferencias culturales y lingüísticas de las personas que los utilizan.
Como resultado, Apple podría tener que crear más software personalizado para los países que venden iPhones, según los analistas.
La empresa dijo que Apple Intelligence estaría disponible el mes que viene en Estados Unidos en una actualización preliminar del software. Apple ampliará la distribución del software a Reino Unido, Canadá, Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica a finales de este año. Dijo que las funciones no estarían disponibles en chino, japonés o español hasta el año que viene.
“Las regiones están cada vez más balcanizadas”, dijo Patrick Moorhead, fundador de Moor Insights & Strategy, una empresa de investigación tecnológica. “Está ralentizando el ritmo de producción de Apple, ya que cada región se hace más a medida”.
Fuente: NY Times
