– En los sexenios de Fidel Herrera y Javier Duarte, el Fraccionamiento Habitacional Club de Golf, frente al aeropuerto El Lencero, se convirtió en el paraíso para los del jet set de la administración pública de Veracruz.
Casi todos los del círculo cercano de aquellos priístas presumieron sus residencias en ese lugar, algunas adquiridas con recursos del erario, según acusaciones del propio gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, al que le restan 31 días con esa investidura.
Ahí, inclusive, Yunes despojó —aunque él diga que recuperó— de distintos inmuebles a quienes hoy gozan de impunidad por la devolución de propiedades pactada.
Una de las residencias de las que se adueñó mediante la figura de la «donación» fue la que está ubicada en Malinalco 9 del Club de Golf.
Los vecinos del exclusivo fraccionamiento aseguran que la casa —valuada en algo así como 8 millones de pesos— perteneció a Adolfo Mota Hernández, el ex secretario de Educación (SEV) de Duarte, quien además tiene otras propiedades ahí mismo, algunos lotes en la calle Cocoyoc.
Apenas hace unos días, en esa residencia se inició una mudanza resguardada por agentes ministeriales, quienes durante los dos últimos años cuidaron, día y noche, al inquilino del lugar: el fiscal general del Estado, Jorge Winckler Ortiz.
Fuentes consultadas que pidieron el anonimato advierten que el abogado de la familia Yunes —con membrete de fiscal de Veracruz— ordenó en las semanas recientes a la administración del «Club de Golf Xalapa Asociación Civil» colgar un anuncio de venta, pues en poco tiempo la desocupará.
La propiedad del inmueble habría sido conseguida sin ser reportada como parte de los «bienes recuperados» de los duartistas mediante la «donación», el mismo mecanismo que se utilizó para quitarle bienes a personajes como Édgar Spinoso Carrera, también exfuncionario de la SEV (en donde ocupó la Oficialía Mayor), con los que consiguió perdón y olvido.
Para efectuar esa «donación» se utilizó como gestor oficioso del Gobierno del Estado de Veracruz al primo hermano de Winckler, Daniel Ortiz Peña, quien actualmente se desempeña como encargado del Registro Público de la Propiedad en Boca del Río, colocado ahí para cuidar cada una de las propiedades de los Yunes.
No está clara la transferencia de la propiedad de la casa de Malinalco 9 del Club de Golf, toda vez que los actos jurídicos en materia inmobiliaria de esa propiedad fueron «blindados» en el Registro Público de la Propiedad de Xalapa.
Lo que es un hecho es que está aún habitada por el fiscal Winckler, lo que configuraría un acto de abuso y complicidad de quienes en este gobierno se vendieron como paladines de la justicia.
Fuente: La Jornada Veracruz