Agencias
– La caravana contra el acoso y las violencias que se realizó en días pasados en diversas facultades de la Universidad Veracruzana, puso al descubierto un secreto a voces, la discriminación, el acoso sexual de parte de maestros hacia las jóvenes.
Frases como: «Con ese escote, me provocas», «Huelo la menstruación», «Mi amor, me pongo celoso», «Eres un útero con patas», «Eres rarito», hasta invitaciones personales no apropiadas, son algunos de los mensajes que se colocaron en un tendedero que causó la molestia de académicos y también de alumnos.
La red de apoyo de mujeres de la Universidad Veracruzana en su página de Facebook denunció agresiones en la Facultad de Derecho de parte de un administrativo.
«Más de un profesor utilizó discursos violentos hacia nosotras y el uso de poder dentro de las instalaciones, como es el caso de la disculpa obligada que la Dra. Esperanza Sandoval exigió que realizáramos, amenazando con demandarnos y que bajo las amenazas se hará la denuncia respectiva al temer por la integridad física y moral de las integrantes de la red».
Cabe mencionar que dicha académica fue señalada de hacer comentarios discriminatorios en contra de alumnas. Pero esta no es la única denuncia que se ha detectado dentro de la Universidad Veracruzana.
Alumnas y alumnos de la Facultad de Derecho han realizado diversos señalamientos desde 2015 en contra del maestro José Ramón Rodríguez Barradas, quien lleva varias décadas como académico, pero estas no han procedido.
Maestro de la Facultad de Derecho hostiga y discrimina a estudiantes En febrero de 2015 dos alumnas lo denunciaron ante el Consejo Escolar de la Facultad por comentarios misóginos y sexuales en su contra. Las alumnas que pidieron el anonimato denunciaron que el académico les hizo comentarios impropios: «Nos decía: ‘mi amor’.
Que se ponía celoso si hablábamos con alguien más.
Nos obliga a dejar el teléfono en el escritorio, se acerca a las chavas y nos dice ‘yo huelo la menstruación’».
Las jóvenes interpusieron una queja denunciando el comportamiento del docente.
Sin embargo, las quejas nunca fueron notificadas debidamente ni investigadas por las autoridades de la Facultad de Derecho, por lo cual dejaron que prescribiera. En junio de 2018, una nueva queja se presentó contra el mismo profesor.
Esta vez, 14 alumnos de la Facultad enviaron una carta exponiendo actitudes de hostigamiento y discriminación del maestro.
En una clase, según testimonio de un alumno, el maestro comentó que Miguel Ángel Mancera –ex jefe de gobierno de la CDMX– jamás podría ser presidente «porque era rarito», cuando fue cuestionado por los alumnos por los comentarios, estalló gritando y alegando cuestiones de religión.
En esta queja dirigida a José Luis Cuevas Gayosso, director de la Facultad, los estudiantes también señalaron que son discriminados por sus preferencias sexuales.
En entrevista, uno de los agraviados que por temer represalias omitió su nombre, señaló: «No creemos prudente que el maestro se acerque a una niña y le haga un comentario como ‘yo huelo la menstruación’, o que le diga a una joven que se pone celoso cuando habla con otras personas».
Señalaron también que el maestro ha tenido enfrentamientos en clase con alumnos y casi llega a los golpes, por lo que varios han preferido salirse de su clase o llevársela a repite. La denuncia de los estudiantes fue llevada ante la Dirección de Asuntos Laborales, donde el maestro fue citado a comparecer junto a tres alumnos.
A la audiencia que duró más de nueve horas, el maestro llevó un equipo de tres abogados. «Nosotros solo íbamos acompañados de la representante de la Unidad de Género, a la que también intentaron desestimar e intimidar durante la audiencia» señalaron.
Los universitarios reclamaron que este catedrático tiene antecedentes y varios reportes por la conducta de hostigamiento en contra de alumnas. Sin embargo, no se ha actuado en su contra.
Las alumnas también cuestionaron que la Universidad Veracruzana tiene una guía para la atención de casos de hostigamiento y acoso sexual, pero no un protocolo a seguir en estas situaciones, lo que pone en desventaja a las estudiantes.
Relataron que durante la audiencia a la que se enfrentaron al maestro, recibieron también comentarios discriminatorios, risas burlonas y miradas agresivas, todo esto sin llamar al orden.
Incluso, durante la audiencia se pidió el expediente académico de los estudiantes, «ellos lo quisieron desviar por ese lado, cuando lo que están en cuestionamiento es una conducta del maestros, pero se va a la audiencia no como víctima, sino en calidad de acusados».
Pese a los diversos testimonios, en una resolución pública de Patricia Ramírez González, jefe del departamento de la Universidad Veracruzana, el 9 de julio pasado se determinó que los estudiante no pudieron acreditar los hechos ni tenían elementos de prueba suficiente, por lo que no procedió una sanción administrativa ni investigación en contra del académico.
Los estudiantes agraviados advirtieron que pedirán la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), «no vamos a permitir que se quede impune, hay más alumnos y alumnas lastimados, es su modus operandi, lo ha hecho durante 40 años; no somos cobardes y aun cuando tenemos miedo a represalias, no vamos a permitir que esto siga sucediendo».
Los alumnos incluso señalaron que han recibido llamadas de advertencia sobre este caso, «recibí una llamada de una persona de la Facultad de Derecho; me dijo: ‘Ten cuidado, me habló una persona y me dijo que cerráramos filas y tronáramos a todos lo que signaron el documento».
UV no da a conocer número de denuncias por acoso María Karina Mendoza, integrante de la Coordinación de la Unidad de Género de la UV, informó que hay varios contratos de maestros que han sido rescindidos por prácticas de acoso y hostigamiento sexual.
Sin embargo, no precisó la cifra. Apenas en agosto pasado, el Instituto Veracruzano de Acceso a la Información ordenó a la Universidad Veracruzana (UV) poner a disposición de quien lo requirió, diversa información relacionada con casos, quejas, denuncias y sanciones con respecto a hostigamiento o acoso sexual y otros tipos de violencia de género.
Y esto es porque la Universidad respondió que no contaba con denuncias en sus archivos, dado que no es su facultad recibirlas e investigar delitos del fuero común, sino que compete a la Fiscalía General del Estado, pues estos se persiguen solo en caso de presentar formal denuncia de hechos.
Sin embargo, el peticionario recurrió al IVAI al considerar que la negativa vulneraba su derecho, pues desde su solicitud precisó que la UV cuenta con la «Guía para la atención de casos de hostigamiento y acoso sexual», donde se establecen protocolos internos para dichos casos.
Las cifra negras de acoso En Veracruz, 404 mujeres han interpuesto denuncias ante la Fiscalía General de Estado (FGE) por acoso sexual. Empero, apenas 11 carpetas han sido consignadas ante un juez para su investigación, según datos del Sistema de Investigaciones Ministeriales de la Fiscalía.
Las agresiones se concentran en mujeres de 21 a 30 años quienes han presentado 96 denuncias, pero también en menores de 11 a 20 años quienes han presentado 95 denuncias en total.
2017 se tenía un reporte de 131 denuncias.
El delito de abuso, acoso y hostigamiento sexual, se contempla en la Ley de Acceso a una Vida Libre de Violencia y el código penal.
Establece de seis meses hasta 3 años de prisión, o multa de hasta 300 días de salarios mínimo a quien cometa el delito de acoso sexual, entendiéndose a quien con fines lascivos acose a una persona de cualquier sexo.
Sin embargo, de las 404 denuncias interpuestas, solo hay 11 carpetas de investigación que han sido consignadas ante un juez: siete en 2015, cuatro en 2016 y ninguna en 2017.
Los municipios con mayor número de casos y denuncias de acoso sexual son: Coatzacoalcos, Córdoba, Tuxpan, Veracruz, Xalapa, Misantla y Tierra Blanca.
Fuente: Coatza Digital
