Alma E. Muñoz y Alonso Urrutia

– Ciudad de México.- Para no ser «rehén» de los grupos que en México «hacían su agosto» la venta de medicamentos y para combatir la corrupción, el presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó compras consolidadas por alrededor de 60 mil millones de pesos en el extranjero –80 por ciento de los fármacos que requiere México–, con vigilancia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), para 2021 y posiblemente se aplicará también en 2022.

Informó lo anterior el titular de la Secretaría de Salud, Jorge Alcocer, tras una reunión en el Palacio Nacional, donde se definió que las licitaciones las realizarán la Oficina Panamericana de la Salud –con base en su norma y la de la Organización Mundial de la Salud– y la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos. El enlace será el representante permanente de México ante la ONU, Juan Ramón de la Fuente.

Por la mañana, en conferencia de prensa, el mandatario anticipó que las compras consolidadas en el extranjero resolverán el abasto de fármacos, que se nos ha dificultado porque era mucha la corrupción que prevalecía en la compra-venta. Algo escandaloso, de miles de millones de pesos, dijo.

Aseguró que “cuando se regeneren los que se dedicaban a la venta de los medicamentos, vamos a poder adquirirlos en el país. No vamos a ser rehenes de grupos que lucraban, vendían hasta medicinas adulteradas, caducas, y acaparaban todas las compras del gobierno«.

«Laboratorios muy famosos que pensaban que por tener buenas relaciones con los medios de información y con campañas de desprestigio al gobierno nos iban a doblegar», afirmó.

Más tarde, el titular de la Ssa mencionó que gastarán menos de lo que se invirtió en 2018 y en 2019. Hace un año, según el director del IMSS, Zoé Robledo, implicó un desembolso de 70 mil millones de pesos.

Alcocer destacó que las buenas relaciones entre las instituciones oficiales permitieron superarar reticencias para no realizar las compras de forma individual, luego de que por la pandemia los medicamentos se retrasaron porque no había vuelos y «tuvimos que hacer ajustes». Ahora, dijo, todos pusieron sobre la mesa sus necesidades para obtener buenos fármacos de todo tipo –que llegarán también a los estados–, inclusive nuevos tratamientos.

De la Fuente explicó a su vez que a las agencias de la ONU se harán llegar las necesidades de México para que se encarguen, de conformidad con el derecho internacional y sus rigurosos requisitos de transparencia y rendición de cuentas, «de las licitaciones correspondientes para los próximos años». Va a tomar tiempo, hay que hacer los convenios, pero es una buena decisión, sostuvo.

Fuente: La Jornada.

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