Osvaldo Antonio Sotelo
-Coatzacoalcos, Ver. – Enfermedades, así como daños en la flora y fauna, es lo que ha dejado a su paso la producción de coque en el municipio de Jáltipan de Morelos.
A mediados del 2013 fue cuando la empresa “ADN Energía de México” llegó en este municipio del sur de Veracruz, iniciando al siguiente día la contaminación.
Entre las afectaciones de salud que tienen en la comunidad, se ha detectado que persiste el cáncer, leucemia, problemas respiratorios y hasta daños cerebrales.
“Yo creo que en espacio de dos meses fallecieron cuatro niños por derrame cerebral, más la gente adulta está sufriendo mucha deformidad de huesos”, indicó asesora de la agrupación “Chogosteros en Acción”, Julissa Hernández Gijón.
En la flora se han perdido cosechas, y los frutos no alcanzan su tamaño, ni su forma y sabor.
Los animales, también sufren deformidades en sus huesos, advirtió la investigadora.
Esto se debe a que, en el momento de evaporación del coque, se desprende una nube con compuestos químicos como vanadio, níquel, cadmio, mercurio, plomo y el azufre.
“Esta región era transparente, podríamos ver el cielo azul, las estrellas, ahorita a distancia ya no se ven, veíamos los volcanes de San Martin y Santa Martha”, comentó la ambientalista.
La nube tóxica no solo cubre el municipio de Jáltipan, sino varios municipios a su alrededor, pues llega a 100 kilómetros a la redonda.
Fuente: Coatza Digital
